Si Ud. desea leer
el libro de pensamientos del Dr. Spicasc
aquí lo tiene:
Toma de aquí lector amigo lo que te sirva o te guste. Como ves soy un optimista incorregible ya que puedes irte sin nada y enojado.
No leas el Capítulo III (sobre la vida espiritual) si consideras que lo mejor de la vida es lo que se deposita en el banco, se fornica o se paladea.
La tolerancia es virtud rara que se predica pero no que se practica así que ni la pido ni la espero para lo que escribo. Digo lo que pienso y me aguanto los temporales que vengan.
Todo se escribió en base a reflexión, fantasía y memoria y es difícil decir donde están las fronteras de cada una de ellas. Pero no importa pues la finalidad última es ser útil y agradar.
A menudo quienes luchan y se depuran por ser muy originales finalizan asfixiados en su propio marasmo o simplemente se quedan sin nada. Por ello solo suprimí aquí de lo escrito solamente aquello que el buen gusto exigió que así lo hiciera.
La dosis ideal es de tres grageas (lee frases) diarias pues lo ideal es siempre comprender y no solo conocer. El destino natural de las ideas es ser superadas por otras y eso deseo para las mías si es que no lo están ya.
Cuando una frase te resulte ofensiva piensa que no la escribí pensando en ti o bien que se trata quizás de un error causal mío. Lichtenberg decía que es imposible cruzar entre una muchedumbre con la antorcha de la verdad en la mano sin chamuscarle las barbas a alguien.
Si disfrutas de la lectura te lo agradezco pero no solo eso: yo la pasé de maravilla escribiendo esto que me ha dado tanto provecho y placer. Se trata en sumo de residuos metabolizados del haber vivido, pues eso en suma es la experiencia.
Dedico el libro a las mujeres, las que son maravillosas en medida directamente proporcional a su dulzura y a su femineidad.
Y si no te gusta nada del librito mío perdón por todo y peor para ti y para mí.
Dr. Spicasc